El Dr. Bruner, tras numerosos estudios realizados en el Centro Médico Universitario de Valderbilt, en Nashville, anunció que él podría llevar a cabo la operación, con el bebé dentro de la matriz materna.
Durante la inervención, el cirujano extrajo el útero mediante una cesárea y practicó una pequeña incisión a la bolsa, a través de la cual le fue posible operar al pequeño Samuel.
Cuando el doctor estaba acabando la operación, Samuel sacó su pequeña mano a través de la incisión y agarró el dedo del médico, el cual se quedó muy sorprendido y declaró después haber vivido el momento más emotivo de toda su vida, cuando pudo contemplar la pequeña manita sujeta a uno de sus dedos como si de este modo el bebé le estuviese agradeciendo el haberle salvado la vida. El personal del quirófano pudo fotografiar este momento tan especial e hizo esta foto que ha dado la vuelta al mundo.
Fotografía Copyright 1999 Michael Clancy (fuente) |
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